Esta receta tenía muchas ganas de prepararla, había visto los roscos en cocina con ana, y no veia la hora de hacerlos. Ella tenía dos recetas y yo me he decantado por una que me pareció sencillita, aunque tengo que decir que mis roscos parecetn rosquilla, no tienen nada que ver con los suyos. No se si será por los cortes que hice, o porque los hice muy pequeños, no se, no se. Lo que si se, es que de sabor están DE MUERTE, se deshacen en la boca de tiernos que son (no son como rosquillas aunque lo parezcan)
Ingredientes; por cada huevo (yo usé 2 huevos y me salió una buena fuente de roscos)
4 cucharadas de aceite, 4 cucharadas de leche, 4 cucharadas de azúcar y 2 sobres de gaseosa (uno de cada color, de venta en mercadona)
harina la que admita (y odio decir esto, pero es lo que ponia la receta y le he ido poniendo, la próxima vez a ver si la voy pesando).
Se baten los huevos con el azúcar y se van añadiendo todos los liquidos. Mezclamos bien.
En un bol puse harina y le añadí la gaseosa (como no sabia cuanta harina iba a utilizar, preferí poner la gaseosa en la que sabía iba a usar.
Le vas poniendo el harina poco a poco. Formamos una masa un tanto pegajosa (no mucho y la dejamos reposar (acabo de darme cuenta de que no la dejé reposar porque iba con prisa, tal vez por eso subieran diferentes a los de Ana, la próxima vez me acordaré)
Con las manos humedecidas con aceite, vamos cogiendo porciones de masa y formando los roscos, freimos en aceite bien caliente y espolvoreamos con azúcar.
Un segundo mas tarde 